¿Qué es la democracia sin el periodismo independiente? Sin aquel periodismo que representa la voz de un pueblo que está cansado de engaños, de montajes, de ser manipulado, pero en especial, cansado de los monopolios de comunicación tradicionales.
El periodismo independiente per se va en contra del periodismo mercantilista, siendo así, fundamental para la creación de sociedades democráticas y para el fortalecimiento del derecho a la libertad de expresión. Sin embargo, este periodismo se ha visto amenazado al ser un medio de comunicación alternativo que da acceso y divulgación a información crítica que abarca áreas a las cuales los grandes medios de comunicación no dan cobertura. Este periodismo es un periodismo libre que no está sujeto a la influencia del poder empresarial, del poder eclesiástico, del poder político. En fin, no está sujeto a ningún tipo de poder que busque imponer sus narrativas. ¡Por lo que proteger al periodismo independiente es proteger la democracia!
En la actualidad, las redes sociales, pero sobre todo la cuarta transformación y el hecho de que la gente cada vez se involucre más en los asuntos políticos del país, han incentivado y propiciado el surgimiento de nuevos comunicadores independientes que buscan informar de manera veraz y concientizar al pueblo.
No obstante, éste enfrenta muchas desigualdades y en diversas ocasiones es excluido de los derechos con los que cuenta la mayoría de las y los periodistas y defensores de derechos humanos, El 20.6% de las personas ocupadas como periodistas y locutoras representa a personas que trabajan por cuenta propia o son empleadores, trabajadores sin pago y otros (INEGI 2020). De esta forma, el porcentaje de personas que deciden ejercer su trabajo de esta manera, muchas veces carecen de recursos para realizar su labor. Así mismo, su trabajo es desacreditado por no contar con una tarjeta de identificación de algún medio de reconocimiento público. Sin mencionar, que sufren de violencia, agresión y amenazas de odio en contra de su libertad de expresión inclusive por parte de senadoras (Lilly Téllez, Xóchilt Gálvez y Kenia López Rabadán) violando así artículos como lo son el 6, 7 y 8 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Por lo que, tanto senadoras como cualquier servidor público que viole los derechos de los periodistas debe de ser sancionado y dejar su cargo. No debe de existir impunidad ante ningún caso, pero claro, también existe otro problema… Se necesitan reformas profundas para las fiscalías, también se necesita mejorar el mecanismo de protección a periodistas y defensores de derechos humanos (en especial a nivel estatal) así como una limpieza a la FEADLE. Y por lo que ya he expuesto antes, Pero también, es de suma importancia que se cree una iniciativa de ley para la protección a periodistas independientes.
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
Comentarios