A lo largo de 2024, la economía mexicana mostró un desempeño positivo con un crecimiento del 1.5%, impulsado por el dinamismo del consumo y la inversión. A pesar de los desafíos externos y climatológicos que afectaron al país en el último trimestre, la fortaleza del mercado interno permitió contrarrestar estos efectos y consolidar un entorno económico estable.
Uno de los pilares de este crecimiento fue el consumo privado, que aumentó un 3.5%, marcando su cuarto año consecutivo de expansión por encima del promedio histórico. Esta tendencia fue respaldada por el incremento en los salarios reales, una inflación controlada y un nivel récord en la confianza del consumidor. De igual manera, la inversión fija bruta creció un 4.7% en el periodo de enero a octubre, reflejando un ambiente favorable para los negocios y la confianza de los inversionistas.
Finanzas públicas sólidas y récord en recaudación tributaria
En el ámbito fiscal, el gobierno federal garantizó la estabilidad de las finanzas públicas al cumplir con las metas de balance aprobadas por el Congreso. La recaudación tributaria alcanzó un máximo histórico de 14.6% del PIB, lo que permitió fortalecer los ingresos públicos sin necesidad de crear nuevos impuestos. En particular, la recaudación del ISR aumentó 2.2% en términos reales, mientras que la del IVA superó las expectativas, alcanzando el 4.1% del PIB.
Adicionalmente, el gobierno destinó 45 mil millones de pesos a la capitalización del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, elevando su saldo a 97 mil millones de pesos, un incremento real del 129.1% respecto a 2023. Este fortalecimiento de los amortiguadores financieros garantiza una mayor capacidad de respuesta ante posibles choques económicos futuros.
Máximo empleo y estabilidad inflacionaria
Otro de los grandes logros del año fue la generación de empleo. La tasa de desempleo promedió 2.7% en 2024, el nivel más bajo en la historia del país, reflejando una mejora en las condiciones laborales y un aumento sostenido en los salarios reales. Destaca la mayor participación de las mujeres en la fuerza laboral, un indicador que alcanzó su nivel más alto por tercer año consecutivo.
Por otro lado, la inflación cerró en 4.2%, con una inflación subyacente del 3.7%, la más baja desde 2019. La estabilidad en los precios fue impulsada por una mayor disponibilidad de productos agrícolas y la moderación en los costos de los energéticos y servicios.
Inversión extranjera y comercio en niveles históricos
El sector externo también reflejó un panorama alentador. La inversión extranjera directa alcanzó un récord de 36 mil millones de dólares en el tercer trimestre de 2024, mostrando una tendencia de crecimiento sostenido. En paralelo, las remesas registraron su nivel más alto de la historia, mientras que el turismo internacional acumuló seis bimestres consecutivos de expansión, con 77 millones de turistas internacionales hasta noviembre.
México consolidó su papel como principal socio comercial de Estados Unidos, con un crecimiento trimestral de 0.9% en las exportaciones, impulsado por un tipo de cambio competitivo y la recuperación de la demanda global. Las importaciones también reflejaron la fortaleza del consumo interno, a pesar de las fluctuaciones de precios internacionales.
Más inversión en infraestructura y bienestar social
El gasto público creció 7.7% en términos reales, alcanzando el 27% del PIB, con una fuerte inversión en desarrollo social e infraestructura. Los recursos destinados a educación, salud y protección social aumentaron en 10.8%, 9.8% y 3.6%, respectivamente, mientras que la inversión en infraestructura creció 11.4%, consolidando la conectividad regional y la capacidad productiva del país.
Gracias a una gestión eficiente de la deuda, el déficit público se redujo a 4.9% del PIB, por debajo de lo estimado, mientras que la deuda neta del gobierno federal se mantuvo estable en 15.2 billones de pesos.
México cerró 2024 con bases económicas firmes y una perspectiva favorable para 2025. La estabilidad macroeconómica, el fortalecimiento de los ingresos públicos y el crecimiento sostenido del consumo y la inversión aseguran un entorno propicio para seguir impulsando el desarrollo del país.
Comentarios