La propuesta controvertida de la jefa de gobierno Clara Brugada sobre la reducción del 50% del uso del agua del Sistema Cutzamala ha causado escozor entre sus opositores. Sin embargo, esta medida tiene como objetivo mejorar la sostenibilidad hídrica de la Ciudad de México, tomando en cuenta ejemplos exitosos en otros países, por ejemplo:
En Australia, durante una severa sequía, se implementaron estrictas restricciones en el uso del agua. En California, EE.UU., también se adoptaron políticas para reducir el consumo de agua y promover la reutilización de aguas residuales. Israel es otro caso notable, conocido por su avanzada tecnología en la gestión del agua, incluyendo la reutilización de aguas residuales para riego agrícola.
El agua es un recurso vital y un derecho humano, para la vida y la sostenibilidad de las ciudades, el agua es reconocida como un derecho humano en el 2010, a través de la Asamblea General de las Naciones Unidas quien adoptó una resolución que reconoce explícitamente el derecho humano al agua potable y al saneamiento. Este derecho se fundamenta en la importancia del agua para la vida y la dignidad humana.
En la Ciudad de México, varios sistemas de distribución de agua desempeñan un papel crucial en el abastecimiento de la población. Los principales sistemas de distribución incluyen el Sistema Cutzamala, el Sistema Lerma y los pozos del Valle de México.
Sistema Cutzamala: Abastece alrededor del 30% del agua potable de la ciudad. Transporta agua desde fuentes ubicadas a más de 150 km de distancia.
Sistema Lerma: Completa el abastecimiento con aproximadamente el 10% del agua potable de la ciudad. Extrae agua de manantiales y pozos profundos.
Pozos del Valle de México: Constituyen la fuente de agua más importante, proveyendo aproximadamente el 60% del suministro. La sobreexplotación de estos acuíferos ha generado hundimientos y otros problemas geológicos.
El proceso de llegada del agua a la ciudad implica su captación en fuentes lejanas, tratamiento en plantas potabilizadoras y distribución a través de una compleja red de tuberías y bombas.
Clara Brugada complementa sus propuestas con acciones que ya está implementado en la Ciudad de México. Entre estas en octubre de 2024, el Congreso de la Ciudad de México aprobó reformar la Constitución local para transformar el Sistema de Aguas de la Ciudad de México en cuanto a su naturaleza jurídica, y crear la Secretaría de Gestión Integral del Agua. Este nuevo organismo tendrá la responsabilidad exclusiva de la gestión y distribución del agua en la ciudad. Además, el 9 de octubre del año pasado, se instaló el Gabinete del Agua, un equipo dedicado a supervisar y coordinar la gestión hídrica de manera continua, coordinando por diferentes dependencias para asegurar una respuesta eficiente.
Otra iniciativa destacada es la creación del C5 del Agua, un centro de monitoreo que supervisa en tiempo real el agua potable y el drenaje de la Ciudad de México, que permite la atención inmediata de fugas y problemas de distribución mediante tecnología avanzada. Cuenta con 1,499 cámaras de videovigilancia en puntos clave, como cárcamos de bombeo, plantas potabilizadoras, tanques y válvulas y una línea telefónica de atención inmediata para reporte de fugas *426 H2O.
El programa, “Agua Bienestar” busca garantizar el acceso al agua potable a bajo costo (5 pesos garrafón) para todos los habitantes, especialmente en zonas con recursos limitados.
En cuanto a la extracción del vital líquido de los pozos y los mantos acuíferos la Jefa de Gobierno señaló, que “una gran parte de los recursos se va a destinar a garantizar que los pozos existentes funcionen correctamente y otorguen la cantidad de agua necesaria.” La sobreexplotación de estos acuíferos ha generado hundimientos y otros problemas geológicos que requieren atención urgente y eficaz.
En cuanto a los temas referentes a la infraestructura propone: Captación de Agua de lluvia, mediante la Instalación de sistemas en hogares y edificios públicos para reducir la dependencia de fuentes subterráneas, así como reglamentar nuevas construcciones para exigir cosechadores de agua de lluvia en nuevas construcciones. Mejora de infraestructura, renovación de tuberías y construcción de nuevas plantas de tratamiento de aguas residuales.
Aumentar la Infiltración de agua de lluvia al subsuelo el mejoramiento y mantenimiento de los pozos. Clara Brugada, también contempla una política que Involucra a los tres niveles de gobierno y el gobierno metropolitano para asegurar inversión continua entre estas Incrementar 20 metros cúbicos de agua para el valle de México, para aumentar el suministro metropolitano y la rehabilitación de 11 fuentes de abastecimiento
En cuanto al agua tratada, se propone sustituir agua potable en actividades agrícolas, industriales y de riego urbano, la construcción de líneas moradas: Llevar agua tratada a servicios que lo permitan.
Lo que más enfada a la derecha opositora al gobierno de transformación de Clara Brugada tiene que ver conque se corregirá la gestión del agua en la Ciudad de México y ninguna medida contempla la privatización en ninguna de sus formas del agua. El fin responde a recuperar la ciudad lacustre e iniciar un programa de regeneración de cuerpos de agua, a través de la inyección de millones de litros y restablecer el acuífero mediante plantas de tratamiento y regeneración. Construir plantas potabilizadoras, proteger áreas de conservación, erradicar la tala, protección y rehabilitación de ríos y manantiales, evitar la contaminación por descargas industriales y proteger zonas de recarga, la operación de la contraloría social del agua y crear un acuerdo con universidades, especialistas, empresas y comunidades.
La implementación de estas propuestas podrá resultar en una gestión más sostenible del agua en Ciudad de México, ayudando a mitigar los efectos de la escasez y la sobreexplotación de acuíferos, y promoviendo un uso más responsable del recurso hídrico.
Clara Brugada no solamente propuso la reducción de la extracción del agua en el Cutzamala para su mayor rendimiento, sino toda una política pública enfocada en la mejor gestión del recurso liquido vital para que en nuestra ciudad se vaya resolviendo de manera gradual los temas de escasez de agua.
Y aunque existe una campaña de desprestigio contra nuestra Jefa de Gobierno, el tiempo le dará la razón, los esfuerzos y la colaboración inter institucional dará resultados para impulsar la propuesta hídrica.
La implementación de estas propuestas no es solo una lista de acciones; es un llamado a la esperanza. Es creer que, juntos, podemos construir una Ciudad de México más sostenible, más justa y con un futuro hídrico asegurado. Clara Brugada está dando pasos firmes hacia esa dirección, y depende de todos nosotros apoyar y ser parte del cambio.
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
Comentarios