No cabe duda que lo que bien se aprende, nunca se olvida y en la oposición, si algo saben hacer bien o por lo menos eso piensan, es guardar las apariencias.
En estas últimas semanas y a raíz de las actividades de los distintos personajes del partido MORENA, rumbo a las elecciones presidenciales de 2024, en la derecha nacional se comenzó a urdir un plan para escoger por vía de la imposición a quien será su caballo de guerra para dicho proceso.
No es un secreto que la mano que mueve los hilos de los destinos de la alianza Frente Amplio por México, conformada por el PRI, PAN y PRD ya escogió, como bien tuvo a mencionar el presidente, a Xóchitl Gálvez como su representante, “cepillando” a quienes se presenten para contender por dicha candidatura.
Entre algunas caras conocidas están Silvano Aureoles Conejo, exgobernador del estado de Michoacán, quien se encuentra inhabilitado por un período de 11 meses, por la Contraloría de Michoacán, al no haber presentado su declaración patrimonial en tiempo.
También participa Enrique de la Madrid, que tiene como “punto fuerte” ser hijo de un expresidente, además de una diputación plurinominal y haber sido secretario de turismo bajo el sexenio de Peña Nieto.
De igual manera, se encuentra en la contienda Francisco García Cabeza de Vaca, a quien registraron para competir su esposa y hermano, el senador Samuel García, debido a que sobre el ex primer mandatario de Tamaulipas, pesan investigaciones de la FGR por lavado de dinero y delincuencia organizada.
Otra de las caras conocidas y además, el primero en registrarse, es el todavía presidente de la cámara de diputados, el panista Santiago Creel, quien arengó contra el presidente en su discurso. Entre lágrimas y berridos, Creel llamó “desgraciado” al presidente y exaltó entre aplausos, la cualidad de “seres libres” que según él, tienen los integrantes de Acción Nacional para hacerle frente.
Pero de entre todos quienes se registraron para contender por el frente Frente Amplio por México, la maquinaria de la oposición ungió a la senadora Xóchitl Gálvez para ser quien los represente y se enfrente contra quien resulte electo por el partido MORENA.
De inmediato y como si se tratara de los mejores tiempos del PRI, la vieja pero efectiva maquinaria de medios inclinó su balanza hacia Gálvez y con sus cámaras y micrófonos, la convirtieron en el centro de atención de los distintos comunicadores y todos ellos, los que pertenecen al viejo régimen, le rindieron pleitesía.
Que si ella es indígena, que si es la izquierda de la derecha, que es trabajadora (¿?), que si es más humilde que Claudia Sheinbaum, quien ahora pasa a convertirse en fifí. De inmediato se hicieron presentes las comparaciones, los halagos, las reverencias. Incluso apareció un spot televisivo donde se le podía ver, sin arrugas, con kilos menos, corte de estilista profesional, pero sobre todo, con tonos de piel más claros.
Tal parece, que a pesar de los tiempos presentes, algunas cosas no cambian y es que con el destape de la senadora en un medio de comunicación, se vivió como en viejas épocas, el resurgir de los candidatos a modo, aquellos que son puestos en su lugar por el poderoso caballero don dinero, claramente definido en la figura del señor X. González, líder ideológico de Frente Amplio por México.
Pero a la oposición le hace falta más que el aparato mediático para que su candidata triunfe en unas elecciones a nivel nacional. Sueñan con volver al poder perdido en 2018 pero, sobre todo, anhelan regresar a los privilegios que vieron desaparecer y que ahora buscan con ansias, detrás de una fachada de preocupación por el pueblo, por su seguridad y por el trabajo de este.
Para ganar unas elecciones hace falta más que la inteligencia artificial de los anuncios televisivos, no bastan los cientos de minutos de entrevistas donde le recuerden a la futura candidata de un pasado que no es todo lo que cierto que pregonan, hace falta convencer a un pueblo entero de que la verdadera intención de la coalición es eliminar las vicisitudes que el mexicano de a pie enfrenta todos los días y que no los mueve el retornar a sus costumbres del tráfico de influencias y desvío de recursos.
¿Cómo van a convencer a alguien de que sus intenciones son todo lo buenas que dicen, si en este sexenio se han opuesto a todos los planes y proyectos a favor de las poblaciones vulnerables? Ha sido el mismo PAN quien ha votado en contra todas las reformas estructurales para corregir el rumbo que sus propias políticas públicas leoninas, lo llevó a beneficiarse a él mismo y al sector empresarial que impulsaban.
Haría bien Xóchitl en recordar que ella es un títere más de Claudio X. y que si en los días por venir su campaña no levanta a pesar del impulso que este le dé, vía los medios masivos, así como fue impulsada, acabará cayendo en el abandono ante un rostro que sea más fácil de sobrellevar; después de todo, están muy presentes en la memoria de la gente, las ocasiones en que la senadora ha vilipendiado la investidura presidencial y los programas que este ha implementado para los millones que no olvidan que, votar por el PRIAN es volver al jurásico, donde el tiempo se detuvo y donde habitan las botargas dinosáuricas.
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
Comentarios