Luego de casi 24 horas de que Donald Trump se burló de su renuncia como Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau por fin ha emitido una declaración, señalando que no existen posibilidades de que su país se anexe a los Estados Unidos, mencionando que los trabajadores de ambas naciones “se benefician de ser el mayor socio comercial y de seguridad del otro.”
“No existe la más mínima posibilidad de que Canadá se convierta en parte de los Estados Unidos. Los trabajadores y las comunidades de ambos países se benefician de ser el mayor socio comercial y de seguridad del otro”, detalló el disminuido líder del Partido Liberal de Canadá.
Justin Trudeau renuncia como Primer Ministro y líder del Partido Liberal
Fue el día de ayer, cuando el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció su dimisión como líder del Partido Liberal de Canadá y su intención de dejar el cargo de primer ministro una vez que se elija a un nuevo líder para el partido gobernante.
Trudeau, quien ha dirigido el partido durante 11 años y ha sido primer ministro desde 2015, realizó este anuncio en medio de una significativa caída en su popularidad. Recientes encuestas indican que su aprobación ha descendido a aproximadamente un 22%, con un 74% de desaprobación, incluyendo un 52% que expresa una fuerte desaprobación. Además, cerca del 46% de los canadienses abogan por su renuncia inmediata.
Trump se vuelve a burlar de Trudeau tras su renuncia
Tras enterarse de la renuncia de su homologo canadiense, y sabiendo que los conservadores retoman puntos en las encuestas en su vecino del norte, Trump sugirió que “muchas personas en Canadá amarían convertirse en el estado 51” de la Unión Americana.
Si Canadá se fusiona con Estados Unidos, no habría aranceles, los impuestos bajarían, y tendrían total seguridad frente a las amenazas de barcos rusos y chinos que constantemente los rodean. ¡Qué gran nación seríamos juntos!”, escribió Trump en una publicación de la red Truth Social.
Fue en noviembre del 2024, cuando Trump realizó la primera burla contra la soberanía canadiense. Lo hizo frente al primer ministro Trudeau, quien acudió de emergencia a una cena en el club de Mar-a-Lago propiedad de Trump, en el estado de Florida. Ahí, ante la mirada atónita de todo tipo de personalidades, el republicano propuso, a manera de chiste, que Canadá se anexara a los EEUU.
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