En el marco de la transición hacia un nuevo gobierno en Puebla, el gobernador electo, Alejandro Armenta, ha destacado las iniciativas y estrategias que marcarán el inicio de su administración, centradas en combatir la corrupción y promover el desarrollo económico a través de la soberanía energética y tecnológica.
Armenta, quien previamente se desempeñó como presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, recordó sus esfuerzos significativos para frenar el saqueo fiscal y energético del país. “Se combatieron a las empresas fantasmas más de 2.5 billones de pesos, se justificaba a través de la publicación del uso de facturas, no facturas falsas, sino facturas que acreditaban obras inexistentes que implicaba todo un saqueo institucional al erario público, de manera brutal desde el propio gobierno”, subrayó.
El gobernador electo hizo hincapié en la importancia de la soberanía energética y la inversión en la industria petroquímica como ejes clave para el desarrollo de Puebla. “Sin duda, lo comenté en algún momento durante la campaña, tenemos que ir por el desarrollo de la industria petroquímica que es el gran negocio: los derivados del petróleo y los derivados de litio, porque el modelo humanista es la segunda etapa de la cuarta transformación”, afirmó Armenta.
Para lograr el bienestar popular, Armenta llevará a cabo un gobierno austero y eficiente, siguiendo el ejemplo de las acciones federales que permitieron la construcción de la refinería Dos Bocas y la adquisición de Deer Park. Su enfoque estará en separar el poder económico del poder político para garantizar que este último sirva a todos los poblanos, impulsando así un desarrollo inclusivo y sostenible para el estado.
Esta visión estratégica busca posicionar a Puebla como un líder en la industria petroquímica y en la explotación de recursos como el litio, clave para la tecnología del futuro. Con estas acciones, el nuevo gobierno de Puebla espera marcar un cambio significativo en la economía y la calidad de vida de sus habitantes, consolidando un camino hacia el progreso y la autosuficiencia energética.
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