La lucha por la defensa de dos de los temas centrales de la Cuarta Transformación, soberanía y seguridad energética, inevitablemente han sido causa de contrariedad con aquel país vecino, que es conocido por haber obtenido su poder hegemónico a través de golpes de estado a las democracias, Estados Unidos.
Partiendo de los distintos enfrentamientos que se han suscitado durante los últimos días, en los que Estados Unidos amenaza con invadir a México, es importante plantearnos si este asunto se trata de una cuestión meramente mediática o va más allá de ello, debido al delicado tema de una posible intervención militar.
La discusión que se ha puesto sobre la mesa ha sido entorno a los grupos criminales en México y la distribución del fentanilo, un opioide sintético. Tema con el que Estados Unidos busca, con fines electorales, golpetear al gobierno que encabeza el presidente López Obrador, “argumentando” que México es el culpable de las miles de muertes de estadounidenses por sobredosis, pues EEUU se ha visto envuelto en la llamada pandemia de fentanilo, siendo el país que más fallecidos registra por sobredosis de esta droga y que puede traducirse como un mal manejo de su política interna que desembocó en un problema social y económico para este mismo. Sin embargo, ya se ha aclarado que no son México ni los migrantes los principales distribuidores de dicha droga en el país norteamericano, es decir, que el 70% del fentanilo ilegal entra a los Estados Unidos por Canadá y que en 2021 de acuerdo con Cato Institute el 86.3% de los traficantes de drogas de fentanilo condenados fueron estadounidenses.
Lo que habría que preguntarnos realmente es, ¿Quién es el principal financiador de los cárteles mexicanos?, ¿quién los controla?, ¿con que fines se intenta debilitar al gobierno del presidente López Obrador? Y finalmente, si esto se pudiera ligar a la lamentable tragedia ocurrida en Ciudad Juárez en donde murieron 39 migrantes. Y habría que responderlo con una pregunta más, ¿Qué ha hecho Estados Unidos para solucionar la pandemia de fentanilo que viven sus ciudadanos? ¿Y en general para combatir sus propios cárteles de droga? y ¿qué hay de la venta de armas, su principal negocio?
– ¿Quién controla al narco? “Wall Street” respondió el Dr. Alfredo Jalife durante un programa en Tele reportaje. En donde también, el connotado geopolítico lanzó una pregunta concisa, ” ¿En dónde depositan los narcos su dinero? ” seguido de una respuesta clara y contundente, “En Estados Unidos”.
Y es que tan solo Wachovia bank, una de las entidades financieras más grandes de EE. UU y ahora parte de Wells Fargo, lavó dinero de narcos mexicanos, en donde se encontraron miles de millones de dólares en trasferencias electrónicas, cheques de viajero y envíos de fondos a esas cuentas a través de casas de cambio mexicanas, y posiblemente ese dinero se habría utilizado para el rescate de bancos ante la crisis de 2008. No resulta sorprendente que Wells Fargo se unió a la campaña sucia contra el banco del Bienestar, y dejara de dar servicio de envío de remesas mediante este mismo, con el objetivo de presionar en un conjunto ataque con el “departamentito” de estado y la derecha mexicana.
Siguiendo con este mismo golpeteo, lo ocurrido en chihuahua evidenció el contrato firmado por el subordinado gobierno panista de Maru Campos con el gobernador de Texas, Greg Abbot, con el fin de detener a migrantes mediante la operación centinela, acuerdo, en el que se encuentran 200,000,000.00 millones de dólares de por medio. Y ni hablar de las irregularidades en el tan lamentable caso en la Estación migratoria.
Queda claro que a sectores específicos de Estados Unidos les molesta la política interna del presidente López Obrador, los ataques a su gobierno han sido constantes, ahora se vive un ataque mediático y directo de parte de Estados Unidos. Mientras tanto, el fin de semana a través de sus redes sociales el presidente López Obrador envió un mensaje a quienes intentan culpar a los mexicanos de las tiranías que ellos mismos crearon en México y en toda Latinoamérica:
“Amenazan con invadir, venden armas de alto poder en sus tianguis, no hacen nada por sus jóvenes, padecen —lamentablemente— de la terrible y mortal pandemia del fentanilo, pero no atienden las causas. No les preocupa el bienestar, sólo el dinero, ni fortalecen valores morales, culturales y espirituales; tampoco limitan el consumo de drogas, por el contrario, lo fomentan hasta en el deporte. Es penoso y decadente”.
López Obrador
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
Comentarios